Hola a todos, esto que estoy haciendo no lo había hecho nunca, pero creo que es bueno compartir esta información. No suelo ligarme a las chicas hablando, ya que mi táctica se basa en el baile y en la insinuación (tengo la suerte de bailar bien y de no tener vergüenza). Ya me he leído el libro del Método y soy una persona mas o menos culta que puede hablar de casi todo (excepto de fútbol, formula1 y política, ya que no me gusta y no me entero de nada).
El objetivo era una chica con mas años que yo, lo cual no se porque me da mas morbo, y decían que era un objetivo muy difícil, así que me puse manos a la obra. Hasta que conseguí el numero de teléfono me costo dos noches y ya a la tercera noche acabo la pobre en mi cama, bueno pobre no porque la tía disfruto, o eso dijo. Para ello, aunque parezca mentira lo de la regla de los tres segundos en mi caso funciono, y me lance en cuanto la vi que me miro (yo=B y chica=A).
B: Perdona! ¿te conozco?
A: No
B Pues tengo la extraña sensación de que si, o por lo menos de verte antes por aquí.
A: Si, eso es posible porque me gusta salir por aquí, aunque tu no me suenas. ¿Eres de esta cuidad?
B Pues claro, me he criado aquí.
A: No entonces no nos conocíamos de antes.
B Pues no se porque tenia la extraña sensación de conocerte, a no ser que una parte de mi querría conocerte y fuera eso (le sonrió).
A: Vaya será eso (ella me devuelve la sonrisa).
Tras decir los nombres y darnos un par de besos en la mejillas, hable un rato con ella y le dije que me tenia q ir que mis amigos estaban en otro bar, y que ya la vería pronto, aunque estuve 10 minutos mas hablando con ella. Ya me despedí, y le dije que nos veríamos en otro momento.
La vi. el siguiente sábado, baile con ella, jugué con las caricias y a base tira y afloja, conseguí que ella se sincerara mas. A partir de ese momento busque la conversación, hacia temas mas o menos preparados (a base de cagarla en anteriores intentos), y me pidió el numero de teléfono. Quedamos el siguiente martes en un bar tranquilo para hablar.
Vino con un modelito, y muchos colgantes, pulseras y demás adornos de plata, los cuales me hicieron ver que le gustaba llamar la atención y yo se la iba a dar. Para ello en cuanto la ví, saque mi mejor sonrisa y la mantuve toda la noche, y me fijaba que cuanto mas sonreía, ella lo hacia también y todo iba como quería. Además una vez q cogimos confianza, y de oírla hablar de su trabajo y de su estrés, este fue mas o menos la conversación.
A: Además estoy harta de mi jefe y el trabajo me tiene hasta las pelotas.
B: Juer pues si que se te ve estresada, a mi cuando me pasa eso le pido a mi madre que me haga un masaje con unos aceites esenciales que hacemos ella y yo, que son relajantes y son muy caros.
A: ¿Y como los hacéis?
B Lo siento pero si te lo digo ya no es un secreto entre madre e hijo (le guiño el ojo, y ella sonríe). No enserio no te lo puedo decir, aunque cuando aprenda a dar masajes como los da mi madre no me importara dártelos, aunque no te pienses que soy fácil (me echo a reír). ¿Por cierto sabes dar masajes?
A: Bueno algo, pero no muy bien.
B: No vale eso, porque eso también se yo, y es más me atrevería a decir que un masaje mío con los aceites míos te quedarías dormida.
A: Pues mas de una vez me haría falta.
Tras 10 minutos de conversación ya me recordó lo del masaje, y en ese momento supe que la estrategia había ido bien.
¿Sabéis que táctica utilicé para besarla? La de la puntuación del beso que lo comenta Neil Strauss en el libro de el método, y mira por donde que funcionó. Ella estaba hablando de no se que tema, yo le corte de sopetón:
B: Hey! Dime del 1 al 10 como puntúas el como besas… (Sabia que me lo estaba jugando al morir o vencer).
A: Hay pues no sé, igual un 1´5 (en ese momento se noto el ambiente, es lo que pasa cuando las feromonas fluyen entre los dos, así que sabía que era el momento)
B: ¡Un 1´5 ¡ Anda ya! Eso no me lo creo! no será para tanto… (Me acerque y la besé)
Tras parar de besarnos.
B: Un 1´5 yo no te daría, yo te daría un 2´5. (y me reí)
Repetí el beso, aunque os aseguro que besaba como el culo, fue de los peores besos que me he dado.
¿Por qué la bese? No le di tiempo a que pensara, le corte de pronto, le hice la pregunta la agarre y me lancé. A partir de allí no me acuerdo como continué la conversación, ya que una vez conquistado el beso las cosas van sobre ruedas. Terminamos en mi casa, aunque antes paramos en donde trabaja a recoger una chaqueta, y se que era la excusa para hacerlo allí porque sería su fantasía sexual, porque fue increíble hacerlo en el lugar de su curro. Después fuimos a mi casa y ya… Prueba conseguida!
Al día siguiente me sentía bien, lo había conseguido, me acordaba de todo y lo tengo escrito sobre papel, por eso me acuerdo de casi todo. Hay mas detalles pero creo que ya os dado bastante la chapa. Un saludo a todos.
Mensaje editado por: SirLouen, el: 10/08/2007 20:29
